Con las clases extraescolares de cocina, se alternan recetas dulces y saladas para mantener el interés y la creatividad de los niños, fomentando sus ganas de aprender y probar alimentos nuevos. Durante estas sesiones, los pequeños chefs limpian, pelan, cortan, aliñan y cocinan todo tipo de productos. Siguiendo una receta base, los niños tienen la libertad de finalizarla a su gusto, creando sus propias interpretaciones culinarias.

La actividad, que dura una hora y media, es completamente práctica. Los niños aprenden a trabajar en equipo, se animan a probar nuevas combinaciones de alimentos y desarrollan sus habilidades culinarias. Este curso, se ha ampliado la edad de los alumnos y ajustado los días y horarios de las clases para adaptarse mejor a la demanda.

Se fomenta la autonomía de los niños, haciéndolos responsables de tareas como preparar y repartir los utensilios entre sus compañeros, buscar y pesar los ingredientes, montar la cocina y limpiar todo lo que han utilizado después de probar la receta cocinada en clase. Si hay suerte y los niños lo permiten, se llevarán sus creaciones a casa para que sus familias puedan disfrutarlas también.

Además de dulces creativos, se trabajan recetas saludables, utilizando productos de temporada y de proximidad. Las clases se adaptan para festividades señaladas, elaborando platos o dulces típicos de cada celebración. Este enfoque no solo enseña sobre cocina, sino también sobre la importancia de la cultura gastronómica y el uso de ingredientes frescos y locales.

Haremos una fiesta final de todos los grupos la última semana de curso

Esta emocionante aventura culinaria es una oportunidad para que los niños descubran nuevos sabores, desarrollen sus habilidades y disfruten de la magia de cocinar.