Durante el curso de inglés, los alumnos participarán en una amplia variedad de actividades diseñadas para fomentar el aprendizaje de manera dinámica y efectiva. Desde edades tempranas, se emplea el inglés como lengua vehicular en todas las interacciones, asegurando que el idioma se integre naturalmente en su día a día. El uso de recursos audiovisuales enriquecerá la experiencia, facilitando la comprensión y mejorando tanto la expresión oral como auditiva.

Las actividades comunicativas estarán enfocadas en situaciones cotidianas y juegos interactivos, donde los niños podrán practicar vocabulario y estructuras gramaticales de forma natural y divertida. Los alumnos trabajarán en proyectos en grupo y dramatizaciones, fomentando la colaboración y el uso práctico del idioma. Además, se realizarán ejercicios específicos para desarrollar habilidades de lectura y escritura, siempre adaptados a su nivel.

En los grupos reducidos (máximo 6 alumnos), la atención será personalizada, lo que permitirá a los profesores identificar las necesidades particulares de cada estudiante y adaptar las actividades a su ritmo. Los jóvenes también tendrán la oportunidad de participar en debates, presentaciones orales y actividades culturales relacionadas con el mundo angloparlante, lo que les ayudará a conectar el aprendizaje del inglés con sus propios intereses y motivaciones.